sábado, abril 5

madrugadas de ensueño plateado





Mis membranas hipertextualizadas
i 25 
internet 
y marihuana
red neuronal absoluta
que conduce directo
hacia la nada
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internet 
y marihuana
Mi perro Nerón murió de viejo
si lo hubiera filmado cerrando los ojos
en el momento exacto,
majestuoso león de dientes blancos
tendría un gif melancólico
para los días en los que odio  mi vida
y no sé  vivirla.


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internet 
y marihuana

mamá no digas que no escucho,
juguemos a  la deidad doméstica 2.1:
la omnipresencia ante todo 
y una catarata de imágenes bíblicas
de 1 pixel x 1 pixel                             
para cada una. .
(de todo se aprende en la vida
decía la abuela, ¿ te acordás?)
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internet 
y marihuana
Amor, si esto no es un vehículo 
entonces no quiero subirme,
me da vértigo caerme sobre mi misma.                                                                                                             
                                                           
Mi sinapsis demorada en los baches 
de esta red incandescente infinita
madrugadas de ensueño plateado:
titilan ventanas bajo mi colcha violeta,
ahí donde la luz de la ventana no llega.
No quiero seguir
no quiero parar
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internet y marihuana





miércoles, marzo 5

Sueño 22.386 B






Soñé una distopía tecnológico submarina:
había siempre a mi alrededor
una capa envolvente de agua,
yo me movía despacio 
en una burbuja transparente oxigenada.

Habíamos dejado la  tierra
por un mundo mejor,
esperanzados casi no recordábamos
la experiencia aérea y terrestre
de nuestra especie.

Muchos tenían branquias inducidas,
yo aún no podía,
mi familia expectaba 
por mi nuevo aparato de  respiración,
para que todos fuéramos iguales
como debe ser una familia.

Miraba a mi padre
sentía un asco muy primitivo:
en uno de sus lados 
crecía deprisa
una gran  mucosa azul
que se inflamaba roja y  luego cedía.

Yo tocaba mi cuello
temiendo el nacimiento de las mismas agallas
aunque secretamente las deseaba,
odiaba estar sola bajo el agua
no poder nadar hacia los otros,
condenada a vivir en mi esfera.

Una especie de robot biológico
de carne blanca y brillantes escamas
traía oxígeno desde la superficie
todos los días domingos.

Nosotros cuyos cuerpos 
habían rechazado la adaptación química
del nuevo Estado Mundial 
marchábamos
hacia los luminosos puntos de control
hechos de ostras color rosa pálido,
allí donde cargaban nuestros habitáculos 
con oxigeno sucio traído desde arriba.


Muchos balls insultaban, 
maldecían
culpaban al gobierno,
yo, en cambio ,
lloraba desconsolada
ese oxígeno me daba vida
y también me corroía,
era como drogarse o amar,
pero sin que nadie pudiera acompañarme.